Cuándo prescribe una deuda

Cuando nos encontramos con una deuda sin pagar, surge una duda recurrente: ¿Existe un límite de tiempo para que nos la reclamen? Vamos a desglosar este tema y te explicaremos todo sobre la prescripción de deudas y sus particularidades.

¿Qué es la prescripción de una deuda?

La prescripción es una figura jurídica que pone fin al derecho del acreedor de exigir el pago de una deuda y al deber del deudor de cumplir con ella tras cierto tiempo. Esta figura está arraigada en el principio de seguridad jurídica. Por tanto, si has contraído una deuda, no podrán reclamarte su pago indefinidamente.

Fundamento de la prescripción

No solo las deudas están sujetas a prescripción. Otros aspectos como delitos, acciones civiles o sanciones también pueden prescribir. Esta figura se basa en garantizar la certeza y seguridad jurídica de las personas, evitando que se encuentren en una constante incertidumbre. El propósito es asegurar que no se prolongue indefinidamente la posibilidad de reclamar derechos o exigir obligaciones, lo que permite una planificación y tranquilidad para las personas en sus relaciones económicas y sociales.

¿Qué establece el Código Civil?

El artículo 1930 del Código Civil nos da una definición de prescripción. Simplificando, establece que ciertos derechos o acciones pueden extinguirse con el tiempo si no se ejercitan. Esto significa que el transcurso del tiempo puede ser suficiente para que el derecho del acreedor a reclamar se extinga, siempre que no haya habido acciones que interrumpan este plazo.

Interrupción de la prescripción

Un dato crucial es que la prescripción puede interrumpirse. Si el acreedor realiza alguna acción para exigir la deuda, como enviar una carta certificada, el contador de la prescripción se reinicia. Ignorar o no recibir estas notificaciones no detiene el proceso de prescripción.

Plazos de prescripción según la naturaleza de la deuda

Es esencial tener en cuenta que cada deuda tiene un plazo de prescripción diferente. A continuación, te mostramos algunos ejemplos:

Deudas con entidades públicas

• Hacienda y Seguridad Social: La administración tiene 4 años para reclamar deudas tributarias o cuotas de la Seguridad Social, contando desde el día siguiente al final del plazo de pago voluntario. Este período permite a las administraciones públicas tener un tiempo razonable para identificar y reclamar cualquier deuda pendiente, pero también brinda a los contribuyentes la seguridad de que no serán perseguidos indefinidamente.

Deudas bancarias

• Generales: Las deudas, como las tarjetas de crédito o préstamos personales, prescriben a los 5 años. Este plazo se establece para proporcionar un equilibrio entre los derechos de los acreedores y la necesidad de seguridad jurídica para los deudores.
• Hipotecarias: Las deudas relacionadas con hipotecas tienen un período de prescripción de 20 años. Este plazo más largo se justifica por la naturaleza a largo plazo de los contratos hipotecarios y la importancia económica que representan.

Otros tipos de deudas

• Alquileres y pensiones de alimentos: Ambas tienen un plazo de 5 años. Estos plazos se basan en la regularidad y periodicidad de estos pagos, que generalmente son mensuales.
• Suministros (electricidad o gas): Por lo general, es de 3 años, pero algunos tribunales aplican un plazo de 5 años. La variabilidad en estos plazos puede depender de interpretaciones judiciales y legislativas específicas.
• Multas de tráfico: Prescriben a los 4 años. Este plazo busca garantizar que las sanciones se apliquen dentro de un tiempo razonable, evitando así que los ciudadanos estén indefinidamente bajo la amenaza de una sanción pendiente.
• Deudas entre particulares: Las deudas entre particulares, como préstamos personales no bancarios, prescriben a los 5 años. Esto incluye dinero prestado informalmente entre amigos o familiares.
• Honorarios profesionales: Los honorarios debidos a abogados, médicos, arquitectos, entre otros profesionales, prescriben a los 3 años. Este plazo tiene en cuenta la necesidad de estos profesionales de tener un período razonable para reclamar sus servicios prestados.
• Deudas laborales: Las deudas derivadas de relaciones laborales, como salarios impagos, prescriben a los 1 año. Este plazo más corto busca proteger al trabajador, permitiéndole reclamar rápidamente cualquier cantidad adeudada.
• Seguro de vida y accidentes: Las reclamaciones de seguros de vida y de accidentes prescriben a los 5 años. Este plazo permite a los beneficiarios un tiempo suficiente para reclamar compensaciones debidas por estos seguros.
• Deudas comerciales: Las deudas entre comerciantes, derivadas de transacciones comerciales, prescriben a los 3 años. Este plazo está diseñado para asegurar que las reclamaciones en el ámbito mercantil se resuelvan de manera ágil.

Conclusión

La prescripción es un mecanismo jurídico que beneficia a ambas partes, estableciendo un plazo para que los derechos y deberes no se prolonguen indefinidamente. Si crees que una deuda te reclama ha prescrito, deberás ser tú quien alegue tal situación. Es recomendable siempre consultar con un experto legal para entender mejor tus derechos y deberes en esta situación.